Activadísimos mentalmente: beneficios de la ducha con agua fría.
Si el agua fría aumenta el ritmo cardíaco, el flujo sanguíneo y de oxígeno, uno de los beneficios es activar nuestro cuerpo.

Y cuando nuestro cuerpo está activado, también se activa nuestra mente.
Por lo tanto, nos sentimos más despejados, más claros, más atentos, con mejor ánimo.
En consecuencia, todo esto puede llevarnos a ser más productivos en nuestras tareas.
¿Vendrá de aquí el dicho “actuar con la cabeza fría”?
¿Contra la depresión y la ansiedad?
Sin duda que la sensación de mejor ánimo que trae el agua fría podría asociarse con mejorar la depresión.

Pero estos beneficios son temporales, producto del contacto con el agua fría en la ducha.
Esto no quiere decir que no ayude. Según se señala en BBC.com, algunos expertos creen que puede ayudar a lidiar con el estrés.
Además, se señala que las duchas frías constantes pueden ayudarnos a enfrentar el miedo y las situaciones incómodas.
Es un tema controvertido, pero sin duda que tomar terapia con un profesional es la mejor decisión para tratar la depresión.
Sistema inmune.
El sistema inmune no se libra de la activación generalizada que se produce en el cuerpo con el agua fría.
Sin embargo, ¿es real que uno de los beneficios de la ducha con agua fría es mejorar el sistema inmune?
Por ahora, no hay estudios concluyentes que lo avalen.
Recuerda que, sin presencia de enfermedades, la alimentación, la hidratación, el ejercicio y el buen dormir ayudan a fortalecer el sistema inmune.
¿Es verdad que uno de los beneficios de la ducha fría es aliviar el dolor muscular y quemar grasa?
Sin duda que puede ayudar a aliviar el dolor, pero no se ha comprobado que repare las fisuras de los músculos posteriores al ejercicio.

Por otro lado, respecto a que uno de los beneficios de la ducha con agua fría es quemar grasa, no hay nada claro.
El agua fría activa nuestro organismo y puede acelerar el metabolismo, pero esto no es garantía de que se vaya a quemar grasa.
Asimismo, según los expertos, no hay evidencia de que el agua fría convierta la grasa “mala” en grasa “buena”.
Si quieres reducir tu grasa corporal, un buen plan de ejercicios y una buena alimentación pueden hacer mucho por ti.
Ni fría ni caliente: el agua no presenta beneficios para el oído.

Por el contrario, el agua debilita el cerumen, que es la barrera natural contra los microorganismos que generan infecciones.
Cuando nos duchamos con agua fría o caliente, inevitablemente quedan restos en el oído.
Y si no secamos muy bien nuestros oídos, el agua y humedad acumulada puede provocarnos otitis externa aguda.
Para prevenir esta enfermedad, Otisec tiene triple acción:
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Evapora el exceso de agua y humedad del canal auditivo externo.
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Protege la piel sensible del conducto auditivo externo.
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Preserva el delicado pH del conducto auditivo externo.
Además, es muy fácil de usar; solo en 4 simples pasos puedes prevenir la dolorosa otiitis externa aguda.

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Ten en cuenta que Otisec es para prevenir; no debes usarlo si presentas otitis externa aguda.
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